UNA VOZ QUE NO SE ESCUCHA: lo que piden los docentes (Luis Miguel Saravia)
¤ 14/4/2014 ¤ ¤ 0 comentarios
1. ¿"Los que claman en el desierto"? Estos días que aparecen ya transcurriendo escolarmente tranquilos No son tales. El ser docente implica no solo ser diligente en el desempeño de funciones sino estar alerta en las señales que vamos encontrando en el devenir de nuestro trabajo en el aula, en la institución educativa.
En estos días la organización sindical anuncia mediante declaraciones a los medios que harán un paro el día 22 de abril. Sin duda la lista de demandas es la misma que se presentó el año anterior y que no tiene concreción desde las últimas declaraciones. El costo presupuestal sin duda es grande, pero no llegan a satisfacer las expectativas crematísticas.
También existe un embalse de expectativas y de demandas técnico pedagógicas de los docentes que empezaron clases desde el mes de marzo y las respuestas poco tienen que ver con las exigencias que tienen en sus aulas. La maleta de equipaje para un buen desempeño en el aula está, las directivas igualmente, pero existe una carencia de elementos didácticos, metodológicos, que hagan posible que los aprendizajes sean mejores. No se trata de responder sólo a estándares, se trata del desarrollo de capacidades, del talento, de la curiosidad que tiene cada persona, cada alumno en su interrelación con sus compañeros en el aula, en el patio, en el recreo, en el auditorio, en sus lecturas, en los juegos. Es decir en todo lo que abarca la dinámica del proceso de aprendizaje.
2. Recordando desde siempre. ¿Cómo olvidar confidencias, preguntas fruto de la indecisión, de inseguridad, de no querer errar de docentes nuevos, recién egresados y nombrados? ¿Cómo olvidar realidades vividas que se repiten año tras año, décadas de décadas, sin que alguien, desde donde se rige la educación del país, se diese cuenta de las carencias? Una voz que se repite y nadie la escucha, pero sí tiene que cargar con todos los adjetivos posibles por no haber logrado mejorar los resultados de la evaluación censal y otros en PISA. Los resultados siempre tienen una víctima: los docentes, nunca los funcionarios o el gobierno de turno que no supo cumplir su palabra o proveer lo necesario para que el maestro pueda despertar en los niños sus capacidades, sus destrezas, sus conocimientos previos.
A continuación algunas reseñas de pensamiento de docentes con los que he compartido jornadas en diversos lugares del país, tanto en primaria, secundaria, como en formación docente. Son testimonios que encierran mensajes diversos, pero que tienen un sentimiento que debe ser comprendido, escuchado. Lo dicen con sinceridad, con confianza, con sencillez, coloquialmente, por ello no tienen referencia pues es el sentir de muchos docentes anónimos del país. Como un referente más, esta manifestación coincide con lo que expresan docentes de México, de Colombia, de Argentina.
"La formación docente que se imparte está alejada del aula, real, cotidiana. Los formadores de docentes no tienen información sobre el sujeto con el que vamos a trabajar y no nos preparan para tender puentes hacia el otro." "El docente no sólo necesita saber sobre psicología evolutiva, también requiere conocimientos de sociología, antropología, dinámica grupal." "¿Dónde los obtendremos"?
"En los institutos y en las facultades de educación, debería darse alguna orientación para desarrollar el trato con los padres de familia, que cuestionan o no entienden las herramientas educativas que los docentes utilizamos porque tienen una historia escolar diferente." "Es necesario contar con una capacitación política referida a lo laboral: sindicalismo, derechos y obligaciones."
"Nuestras facultades de educación y nuestros institutos superiores pedagógicos no nos forman para hacer una transposición didáctica que haga posible que los contenidos utilizados puedan ser empleados por los alumnos." "Tenemos carencia de elementos didácticos para armar secuencias didácticas y trabajarlas en grupo. Esto no se da sólo con talleres para aprender técnicas y menos desarrollando rutas. Eso es mecánico y no revierte en la formación de la persona."
"La formación inicial te da una base general, pero no suficiente. La formación del docente es de toda la vida. Cada docente debería crear sus propias herramientas en la propia práctica. Eso es nuestro acervo profesional. Por ello solicitamos tener asistencia técnica en las instituciones educativas de EBR para diseñar modelos de intervención y desarrollo pedagógico. El asesor técnico podría pasar por los grados, sugerir modelos de clases, aportar a diversas soluciones a los problemas. Puede conversar con el docente del nivel y encontrar juntos los mejores caminos., formar pareja pedagógica, lo que facilita mucho la labor y eso me ha permitido contar con muchas herramientas didácticas.
Sobre los cursos que se ofrecen para capacitar, están alejados de lo que es la formación inicial o de las últimas tendencias por ejemplo en la enseñanza de las matemáticas, de las comunicaciones, de la ciencia y la tecnología. ¿Y qué hacer para desarrollar todo con el enfoque de interculturalidad? Fácil es enunciarlo, difícil ponerlo en práctica.
Sentimos que no existen espacios para trabajar en equipos. No se trata de sumar horas solamente sino establecer las condiciones para saber utilizarlas. Para fortalecer intervenciones que aborden las mediaciones escolares, de consolidación de grupos, que promuevan la reflexión y el diálogo con los padres de familia y en general para lo que hoy se llama solucionar conflictos.»
Se quedan estas palabras enredadas con otras preocupaciones que nos indican que la pedagogía tiene sus propias preocupaciones, su propio lenguaje, su propia forma de comunicarse, en lo concerniente a conversar con las propias palabras, sobre hechos, sobre experiencias. Se han soltado sentimientos, miedos, dudas, porque existe un reconocimiento al otro, existe un clima de confianza. La directiva, la norma dura y fría no suscita el ambiente necesario para abordarla. Demasiado vertical el lenguaje, se jerarquiza el cumplimiento y no existe un lugar para el propio aporte. ¿Por qué no se opta por la conversación, el diálogo con los docentes? ¿Por qué se piensa solucionar sus problemas profesionales dándoles respuestas del montón, estandarizadas, sin sabor ni color, sin olor a aula ni a docente y menos a alumnos?
3. Mirando el horizonte. Sin duda tenemos mucho por hacer en la formación docente. Pero empecemos de una vez y no cambiemos cuando cambie el Ministro o gobierno. La formación del docente es de toda la vida. Tenemos que inculcar que la cantera desde donde profundizamos la pedagogía es la propia práctica, la lectura de autores clásicos y contemporáneos. Poco se logra en educación cuando se responde a recetas para alcanzar resultados, buenos para la gestión, pero poco representativos para la formación ciudadana.
Los anuncios que se hacen sobre capacitación docente, sobre becas para maestrías nos lleva a preguntarnos ¿es necesario reforzar los post y no cambios profundos en la formación inicial? ¿La reforma iniciada en la segunda parte de los 90 sirvió? ¿Qué tanto ha debilitado la formación docente la incorporación del DL. Nº 882 y se permitió que lo privado ingrese a un campo tan importante como es la formación docente? ¿Qué ha pretendido el mercantilismo al incorporarse en la educación e incluir modelos, palabras, conceptos y políticas bajo el paraguas de apoyar a lo público sin decir que lo que le interesa son los clientes que podían captar?
¿Qué respuesta podemos dar a los futuros docentes y a los formados ante la estandarización, indicadores, metas, resultados que se palpa en su formación que no responde a lo que es la esencia en la educación: formar a la personas? Se ha perdido el respeto al otro, la apertura a la alteralidad. Si se va incluir hay que hacerlo sin tratar de imponer al otro condiciones. Por ejemplo un docente que concluye sus estudios en un instituto de formación docente que pertenece a la educación superior, se le excluye a seguir post grados si previamente no ha cumplido con ciertas condiciones que demanda el estudio universitario. ¿Por qué no se aborda este tema en la política de formación? ¿No es acaso un derecho?
¿Cuánto se invierte en capacitación docente? ¿Qué resultados se vienen obteniendo? ¿Por qué no se invierte en un buen programa de acompañamiento docente que no se reduzca a solo aprendizaje de técnicas y suma de talleres?
Eficacia y eficiencia se demanda, sin embargo poco se hace para que el docente luego de egresado pueda seguir desarrollándose como profesional. Todo lo contrario...
Los maestros y maestras individualmente, en equipo, por institución educativa sugieren el tipo de apoyo que requieren, pero en las altas esferas de las decisiones no se escucha. Solo tienen oídos para sus técnicos. Pocos tienen experiencia en el campo educativo y les haría muy bien escuchar a los docentes del país en su institución educativa y desde allí proponer la política de formación que se requiere. Lo intentó Emilio Barrantes y Arguedas cuando pasaron por el Ministerio, sin embargo queda el amargor de su impotencia cuando los académicos hablando el mismo idioma, menospreciaban el aporte del docente. Mucha sabiduría, menos soberbia; respeto y valoración del otro. Escuchar al maestro.
EDUCACIONENRED.PE
En estos días la organización sindical anuncia mediante declaraciones a los medios que harán un paro el día 22 de abril. Sin duda la lista de demandas es la misma que se presentó el año anterior y que no tiene concreción desde las últimas declaraciones. El costo presupuestal sin duda es grande, pero no llegan a satisfacer las expectativas crematísticas.
También existe un embalse de expectativas y de demandas técnico pedagógicas de los docentes que empezaron clases desde el mes de marzo y las respuestas poco tienen que ver con las exigencias que tienen en sus aulas. La maleta de equipaje para un buen desempeño en el aula está, las directivas igualmente, pero existe una carencia de elementos didácticos, metodológicos, que hagan posible que los aprendizajes sean mejores. No se trata de responder sólo a estándares, se trata del desarrollo de capacidades, del talento, de la curiosidad que tiene cada persona, cada alumno en su interrelación con sus compañeros en el aula, en el patio, en el recreo, en el auditorio, en sus lecturas, en los juegos. Es decir en todo lo que abarca la dinámica del proceso de aprendizaje.
2. Recordando desde siempre. ¿Cómo olvidar confidencias, preguntas fruto de la indecisión, de inseguridad, de no querer errar de docentes nuevos, recién egresados y nombrados? ¿Cómo olvidar realidades vividas que se repiten año tras año, décadas de décadas, sin que alguien, desde donde se rige la educación del país, se diese cuenta de las carencias? Una voz que se repite y nadie la escucha, pero sí tiene que cargar con todos los adjetivos posibles por no haber logrado mejorar los resultados de la evaluación censal y otros en PISA. Los resultados siempre tienen una víctima: los docentes, nunca los funcionarios o el gobierno de turno que no supo cumplir su palabra o proveer lo necesario para que el maestro pueda despertar en los niños sus capacidades, sus destrezas, sus conocimientos previos.
A continuación algunas reseñas de pensamiento de docentes con los que he compartido jornadas en diversos lugares del país, tanto en primaria, secundaria, como en formación docente. Son testimonios que encierran mensajes diversos, pero que tienen un sentimiento que debe ser comprendido, escuchado. Lo dicen con sinceridad, con confianza, con sencillez, coloquialmente, por ello no tienen referencia pues es el sentir de muchos docentes anónimos del país. Como un referente más, esta manifestación coincide con lo que expresan docentes de México, de Colombia, de Argentina.
"La formación docente que se imparte está alejada del aula, real, cotidiana. Los formadores de docentes no tienen información sobre el sujeto con el que vamos a trabajar y no nos preparan para tender puentes hacia el otro." "El docente no sólo necesita saber sobre psicología evolutiva, también requiere conocimientos de sociología, antropología, dinámica grupal." "¿Dónde los obtendremos"?
"En los institutos y en las facultades de educación, debería darse alguna orientación para desarrollar el trato con los padres de familia, que cuestionan o no entienden las herramientas educativas que los docentes utilizamos porque tienen una historia escolar diferente." "Es necesario contar con una capacitación política referida a lo laboral: sindicalismo, derechos y obligaciones."
"Nuestras facultades de educación y nuestros institutos superiores pedagógicos no nos forman para hacer una transposición didáctica que haga posible que los contenidos utilizados puedan ser empleados por los alumnos." "Tenemos carencia de elementos didácticos para armar secuencias didácticas y trabajarlas en grupo. Esto no se da sólo con talleres para aprender técnicas y menos desarrollando rutas. Eso es mecánico y no revierte en la formación de la persona."
"La formación inicial te da una base general, pero no suficiente. La formación del docente es de toda la vida. Cada docente debería crear sus propias herramientas en la propia práctica. Eso es nuestro acervo profesional. Por ello solicitamos tener asistencia técnica en las instituciones educativas de EBR para diseñar modelos de intervención y desarrollo pedagógico. El asesor técnico podría pasar por los grados, sugerir modelos de clases, aportar a diversas soluciones a los problemas. Puede conversar con el docente del nivel y encontrar juntos los mejores caminos., formar pareja pedagógica, lo que facilita mucho la labor y eso me ha permitido contar con muchas herramientas didácticas.
Sobre los cursos que se ofrecen para capacitar, están alejados de lo que es la formación inicial o de las últimas tendencias por ejemplo en la enseñanza de las matemáticas, de las comunicaciones, de la ciencia y la tecnología. ¿Y qué hacer para desarrollar todo con el enfoque de interculturalidad? Fácil es enunciarlo, difícil ponerlo en práctica.
Sentimos que no existen espacios para trabajar en equipos. No se trata de sumar horas solamente sino establecer las condiciones para saber utilizarlas. Para fortalecer intervenciones que aborden las mediaciones escolares, de consolidación de grupos, que promuevan la reflexión y el diálogo con los padres de familia y en general para lo que hoy se llama solucionar conflictos.»
Se quedan estas palabras enredadas con otras preocupaciones que nos indican que la pedagogía tiene sus propias preocupaciones, su propio lenguaje, su propia forma de comunicarse, en lo concerniente a conversar con las propias palabras, sobre hechos, sobre experiencias. Se han soltado sentimientos, miedos, dudas, porque existe un reconocimiento al otro, existe un clima de confianza. La directiva, la norma dura y fría no suscita el ambiente necesario para abordarla. Demasiado vertical el lenguaje, se jerarquiza el cumplimiento y no existe un lugar para el propio aporte. ¿Por qué no se opta por la conversación, el diálogo con los docentes? ¿Por qué se piensa solucionar sus problemas profesionales dándoles respuestas del montón, estandarizadas, sin sabor ni color, sin olor a aula ni a docente y menos a alumnos?
3. Mirando el horizonte. Sin duda tenemos mucho por hacer en la formación docente. Pero empecemos de una vez y no cambiemos cuando cambie el Ministro o gobierno. La formación del docente es de toda la vida. Tenemos que inculcar que la cantera desde donde profundizamos la pedagogía es la propia práctica, la lectura de autores clásicos y contemporáneos. Poco se logra en educación cuando se responde a recetas para alcanzar resultados, buenos para la gestión, pero poco representativos para la formación ciudadana.
Los anuncios que se hacen sobre capacitación docente, sobre becas para maestrías nos lleva a preguntarnos ¿es necesario reforzar los post y no cambios profundos en la formación inicial? ¿La reforma iniciada en la segunda parte de los 90 sirvió? ¿Qué tanto ha debilitado la formación docente la incorporación del DL. Nº 882 y se permitió que lo privado ingrese a un campo tan importante como es la formación docente? ¿Qué ha pretendido el mercantilismo al incorporarse en la educación e incluir modelos, palabras, conceptos y políticas bajo el paraguas de apoyar a lo público sin decir que lo que le interesa son los clientes que podían captar?
¿Qué respuesta podemos dar a los futuros docentes y a los formados ante la estandarización, indicadores, metas, resultados que se palpa en su formación que no responde a lo que es la esencia en la educación: formar a la personas? Se ha perdido el respeto al otro, la apertura a la alteralidad. Si se va incluir hay que hacerlo sin tratar de imponer al otro condiciones. Por ejemplo un docente que concluye sus estudios en un instituto de formación docente que pertenece a la educación superior, se le excluye a seguir post grados si previamente no ha cumplido con ciertas condiciones que demanda el estudio universitario. ¿Por qué no se aborda este tema en la política de formación? ¿No es acaso un derecho?
¿Cuánto se invierte en capacitación docente? ¿Qué resultados se vienen obteniendo? ¿Por qué no se invierte en un buen programa de acompañamiento docente que no se reduzca a solo aprendizaje de técnicas y suma de talleres?
Eficacia y eficiencia se demanda, sin embargo poco se hace para que el docente luego de egresado pueda seguir desarrollándose como profesional. Todo lo contrario...
Los maestros y maestras individualmente, en equipo, por institución educativa sugieren el tipo de apoyo que requieren, pero en las altas esferas de las decisiones no se escucha. Solo tienen oídos para sus técnicos. Pocos tienen experiencia en el campo educativo y les haría muy bien escuchar a los docentes del país en su institución educativa y desde allí proponer la política de formación que se requiere. Lo intentó Emilio Barrantes y Arguedas cuando pasaron por el Ministerio, sin embargo queda el amargor de su impotencia cuando los académicos hablando el mismo idioma, menospreciaban el aporte del docente. Mucha sabiduría, menos soberbia; respeto y valoración del otro. Escuchar al maestro.
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