El 50% de escolares de Chiclayo consume marihuana, según estadísticas de la PNP
¤ 10/10/2015 ¤ diariocorreo.pe ¤ 0 comentarios
La policía Antidrogas busca bloquear a microcomercializadores en los distritos y realiza charlas preventivas preparando a los estudiantes para rechazar las sustancias prohibidas: En grave peligro se encuentran los escolares de la región Lambayeque, pues según las estadísticas de la Sección de Inteligencia Operativa del Departamento Antidrogas de la Policía Nacional del Perú, el 50% de los estudiantes consumen drogas en la región.
Además, las cifras indican que los pequeños consumidores prueban los estupefacientes desde los nueve años de edad, este consumo se inicia como un experimento que en oportunidades se convierte en una adicción, la cual puede llevar a los menores a destruirse personal y psicológicamente.
PUNTOS. Ricardo Bambaren Senmanche, jefe de inteligencia del Departamento Antidrogas, indica que mediante diversas operaciones se detectó que la mayor incidencia de consumo y venta de drogas se concentra en la ciudad de Chiclayo.
Entre los principales puntos donde trabaja a diario la policía figuran los pueblos jóvenes de San Antonio, Fanny Abanto, Jorge Chavez, Campodónico, Atusparia y Urrunaga.
También figuran el pueblo joven 9 de octubre, 19 de septiembre, José Carlos Mariategui, San Sebastían, entre otros; así como en algunos puntos del distrito de La Victoria.
En los mencionados sectores, las organizaciones de tráfico ilícito de drogas y los clanes familiares se han convertido en los principales abastecedores de los microcomercializadores, quienes utilizando su operación hormiga ofrecen a los niños el común y más barato estupefaciente que es la marihuana.
¿En que consiste la operación hormiga? Los inescrupulosos vendedores de droga se camuflan como comerciantes ambulantes de golosinas o de algún otro producto y se ubican en los alrededores de colegios y plataformas deportivas; con solo un sol ofrecen a los menores de edad la droga conocida como "Marihuana", la cual es armada como un pequeño cigarrillo y es consumida por los escolares.
Según el jefe de Inteligencia Antidrogas, entre algunos de los puntos donde se comercializa la droga es en el sector de Atusparia y en Jorge Chávez a unos metros del colegio Elvira García.
"Hicimos una intervención emblemática justo al frente del colegio Elvira García, donde un sujeto conocido como 'El Muelón Julio', había fincado su domicilio, para vender droga", expresó Bambaren.
Otra de las modalidades adoptadas por los microcomercializadores de droga es la de "paseros" que consiste en llevar pocas cantidades de droga en su poder y ello les permite evadir las acciones sancionadoras justas contra estos inescrupulosos.
"El problema es que nuestro nuevo ordenamiento es demasiado garantista, el tener pequeñas cantidades implica que la norma no le dé todo el peso de la ley, pero hay un tema que debería entenderse y analizarse, que es el agravante de vender en los alrededores de un colegio", explicó el agente Ricardo Bambaren.
BLOQUEO. Es en los puntos de mayor incidencia donde la policía trabaja acciones especiales y campañas agresivas, para evitar que los escolares caigan en el consumo de droga.
Por ejemplo, realizan charlas con impactantes videos que conllevan a la reflexión en los escolares, pero estas capacitaciones se brindan a los menores en la compañía de sus padres.
"Lo que se busca es que los escolares reaccionen y sepan que el consumo de drogas es negativo. Los padres deben estar en constante comunicación con sus niños y saber con quienes se juntan, a que lugares van cuando no están en casa", indicó Bambaren.
No obstante, la Policía Nacional del Perú ha emprendido desde hace meses una labor de prevención en las instituciones educativas para bloquearle el negocio a los microcomercializadores de droga. Los efectivos policiales han decidido estratégicamente visitar los colegios de los distritos aledaños para prevenir a los menores y estar preparados si algún inescrupuloso se atreve a ofrecerle algún tipo de drogas.
"Nuestra labor de inteligencia nos ha permitido conocer que estas organizaciones y clanes familiares han planeado alquilar casas en diferentes distritos para comercializar los estupefacientes en ciertos de colegios, entonces nos hemos adelantado a estos hechos y estamos protegiendo a los escolares", expresó Ricardo Bambaren.
Correo viajó hasta el distrito de Mórrope, junto a un equipo de efectivos policiales liderados por el mayor de la policía, Jhony Rodas Ayasta, en esta labor de Antidrogas. Unos 80 alumnos de diferentes aulas fueron capacitados sobre las graves consecuencias que pueden ocasionarles el consumo de sustancias prohibidas.
"En esta labor es necesaria la participación de las autoridades educativas, tanto gerente regional, como de los directores de las Unidades de Gestión Educativa (Ugel)", expresó Rodas Ayasta.
DESCONOCEN. Sobre la falta de coordinación y apoyo por parte de las autoridades educativas, el gerente regional de Educación, Ulises Guevara Paico, dijo que la policía nunca se acercó a solicitar el apoyo y mucho menos conocía sobre la labor emprendida por parte de los efectivos policiales.
"Desconozco sobre eso, pero le daré el número de la coordinadora para que le haga las consultas (...)", expresó la autoridad educativa.
Correo conversó con la directora de Gestión Pedagógica, Pilar Villegas Neyra, quien en un inicio intentó evitar conversar sobre el tema aduciendo que no estaba "en horario de trabajo".
Sin embargo dejó entrever su incomodidad por las versiones de la policía, respecto a la falta de coordinación y apoyo en la labor de prevención que realizan.
La funcionaria se limitó a decir que el sector Educación maneja un programa antidrogas con DEVIDA (Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas), el cual apoya en el tema.
EDUCACIONENRED.PE
Además, las cifras indican que los pequeños consumidores prueban los estupefacientes desde los nueve años de edad, este consumo se inicia como un experimento que en oportunidades se convierte en una adicción, la cual puede llevar a los menores a destruirse personal y psicológicamente.
PUNTOS. Ricardo Bambaren Senmanche, jefe de inteligencia del Departamento Antidrogas, indica que mediante diversas operaciones se detectó que la mayor incidencia de consumo y venta de drogas se concentra en la ciudad de Chiclayo.
Entre los principales puntos donde trabaja a diario la policía figuran los pueblos jóvenes de San Antonio, Fanny Abanto, Jorge Chavez, Campodónico, Atusparia y Urrunaga.
También figuran el pueblo joven 9 de octubre, 19 de septiembre, José Carlos Mariategui, San Sebastían, entre otros; así como en algunos puntos del distrito de La Victoria.
En los mencionados sectores, las organizaciones de tráfico ilícito de drogas y los clanes familiares se han convertido en los principales abastecedores de los microcomercializadores, quienes utilizando su operación hormiga ofrecen a los niños el común y más barato estupefaciente que es la marihuana.
¿En que consiste la operación hormiga? Los inescrupulosos vendedores de droga se camuflan como comerciantes ambulantes de golosinas o de algún otro producto y se ubican en los alrededores de colegios y plataformas deportivas; con solo un sol ofrecen a los menores de edad la droga conocida como "Marihuana", la cual es armada como un pequeño cigarrillo y es consumida por los escolares.
Según el jefe de Inteligencia Antidrogas, entre algunos de los puntos donde se comercializa la droga es en el sector de Atusparia y en Jorge Chávez a unos metros del colegio Elvira García.
"Hicimos una intervención emblemática justo al frente del colegio Elvira García, donde un sujeto conocido como 'El Muelón Julio', había fincado su domicilio, para vender droga", expresó Bambaren.
Otra de las modalidades adoptadas por los microcomercializadores de droga es la de "paseros" que consiste en llevar pocas cantidades de droga en su poder y ello les permite evadir las acciones sancionadoras justas contra estos inescrupulosos.
"El problema es que nuestro nuevo ordenamiento es demasiado garantista, el tener pequeñas cantidades implica que la norma no le dé todo el peso de la ley, pero hay un tema que debería entenderse y analizarse, que es el agravante de vender en los alrededores de un colegio", explicó el agente Ricardo Bambaren.
BLOQUEO. Es en los puntos de mayor incidencia donde la policía trabaja acciones especiales y campañas agresivas, para evitar que los escolares caigan en el consumo de droga.
Por ejemplo, realizan charlas con impactantes videos que conllevan a la reflexión en los escolares, pero estas capacitaciones se brindan a los menores en la compañía de sus padres.
"Lo que se busca es que los escolares reaccionen y sepan que el consumo de drogas es negativo. Los padres deben estar en constante comunicación con sus niños y saber con quienes se juntan, a que lugares van cuando no están en casa", indicó Bambaren.
No obstante, la Policía Nacional del Perú ha emprendido desde hace meses una labor de prevención en las instituciones educativas para bloquearle el negocio a los microcomercializadores de droga. Los efectivos policiales han decidido estratégicamente visitar los colegios de los distritos aledaños para prevenir a los menores y estar preparados si algún inescrupuloso se atreve a ofrecerle algún tipo de drogas.
"Nuestra labor de inteligencia nos ha permitido conocer que estas organizaciones y clanes familiares han planeado alquilar casas en diferentes distritos para comercializar los estupefacientes en ciertos de colegios, entonces nos hemos adelantado a estos hechos y estamos protegiendo a los escolares", expresó Ricardo Bambaren.
Correo viajó hasta el distrito de Mórrope, junto a un equipo de efectivos policiales liderados por el mayor de la policía, Jhony Rodas Ayasta, en esta labor de Antidrogas. Unos 80 alumnos de diferentes aulas fueron capacitados sobre las graves consecuencias que pueden ocasionarles el consumo de sustancias prohibidas.
"En esta labor es necesaria la participación de las autoridades educativas, tanto gerente regional, como de los directores de las Unidades de Gestión Educativa (Ugel)", expresó Rodas Ayasta.
DESCONOCEN. Sobre la falta de coordinación y apoyo por parte de las autoridades educativas, el gerente regional de Educación, Ulises Guevara Paico, dijo que la policía nunca se acercó a solicitar el apoyo y mucho menos conocía sobre la labor emprendida por parte de los efectivos policiales.
"Desconozco sobre eso, pero le daré el número de la coordinadora para que le haga las consultas (...)", expresó la autoridad educativa.
Correo conversó con la directora de Gestión Pedagógica, Pilar Villegas Neyra, quien en un inicio intentó evitar conversar sobre el tema aduciendo que no estaba "en horario de trabajo".
Sin embargo dejó entrever su incomodidad por las versiones de la policía, respecto a la falta de coordinación y apoyo en la labor de prevención que realizan.
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